qué es la gestión de riesgos?

Gestión de riesgos: una práctica esencial para el éxito

9 Febrero 2024Cyril Amblard-Ladurantie Gobierno, Riesgo y Cumplimiento Gestión de riesgos

La gestión efectiva de riesgos es esencial en cualquier negocio o empresa para prosperar y tener éxito. Se trata de identificar, evaluar y mitigar riesgos potenciales que puedan repercutir en el logro de los objetivos. Este artículo explorará el concepto de gestión de riesgos, su importancia y cómo gestionarlos de forma eficaz. 

¿Qué es la gestión de riesgos? 

De acuerdo con la ISO 31000, los riesgos son el efecto de la incertidumbre en los objetivos. Por ello, el objetivo principal de la gestión de riesgos es mejorar los procesos de toma de decisiones, proteger los activos y reducir las pérdidas potenciales o consecuencias adversas para alcanzar los objetivos organizacionales. 

Abarca un enfoque sistemático y proactivo para identificar, evaluar, responder y monitorear riesgos en diversas áreas como finanzas, operaciones, medio ambiente, seguridad y reputación. La gestión efectiva de riesgos implica establecer estrategias de gestión de riesgos, mediante la implementación de medidas de control y de la revisión y actualización periódica de los procesos de gestión de riesgos.

¿Por qué es importante la gestión de riesgos? 

La gestión efectiva de riesgos es crucial en varias industrias y sectores para garantizar el éxito y la sostenibilidad de los negocios. Ayuda a las organizaciones a identificar de manera proactiva las amenazas y a tomar las medidas necesarias para evitar o minimizar su impacto. Al gestionar los riesgos de manera efectiva, los negocios pueden salvaguardar su reputación, generar mayor confianza en las partes interesadas, mejorar la toma de decisiones y aumentar la rentabilidad a largo plazo. 

Técnicas de gestión de riesgos 

Hay varias técnicas y estrategias que se utilizan para mitigar riesgos. Evitar riesgos requiere eliminar actividades o situaciones que puedan suponer riesgos significativos. La reducción de riesgos se concentra en minimizar la probabilidad o el impacto de los riesgos identificados a través de la implementación de las medidas de control. 

La transferencia de riesgos implica transferir la carga financiera de un riesgo a un tercero, por ejemplo, mediante un seguro. Desplegar las técnicas de gestión de riesgos apropiadas es esencial para salvaguardar de forma eficaz los intereses de una organización. 

Cómo gestionar los riesgos 

Gestionar los riesgos de una empresa requiere un enfoque sistemático para identificar, evaluar, mitigar y monitorear riesgos potenciales que podrían causar un impacto en las operaciones, finanzas, reputación y otros aspectos de la organización. Aquí hay un resumen paso a paso de cómo gestionar riesgos de manera efectiva. 

Cómo gestionar los riesgos

1. Identificación de riesgos  

El primer paso en la gestión efectiva de riesgos es identificar los riesgos potenciales que su organización podría enfrentar. Esto implica analizar a fondo los factores internos y externos que podrían interrumpir sus operaciones de negocios. Llevar a cabo evaluaciones de riesgos de manera regular, sesiones de lluvia de ideas y utilizar los análisis de datos puede ayudar al reconocimiento de estos riesgos.

Este proceso ayuda a entender el perfil de riesgo de la organización y permite a los tomadores de decisiones asignar los recursos en consecuencia. 

2. Evaluación de riesgos 

Una vez que ha identificado los riesgos potenciales, el siguiente paso es evaluar su posible impacto y probabilidad. Esto ayuda a priorizar los riesgos con base en su severidad y la probabilidad de ocurrencia. Una matriz de riesgos o herramientas similares pueden asistir en la categorización de riesgos de alta, media o baja prioridad, lo que le permite asignar los recursos de manera apropiada. 

3. Mitigación de riesgos 

Las estrategias de mitigación implican desarrollar planes para minimizar el impacto de los riesgos identificados. Esto podría incluir la implementación de medidas preventivas, mediante la creación de planes de contingencia o de transferir el riesgo mediante un seguro. Al tener una estrategia de mitigación bien definida, usted puede reducir de manera efectiva las vulnerabilidades de su organización.

4. Monitoreo y revisión  

La gestión de riesgos es un proceso continuo que requiere un monitoreo y una revisión constantes. Evaluar de manera regular la efectividad de sus estrategias de gestión de riesgos le permiten adaptarse a las cambiantes circunstancias e identificar nuevos riesgos que pueden surgir con el tiempo.  

¿Cuáles son los diferentes tipos de riesgos? 

Los riesgos se pueden manifestar de varias maneras y categorizar en diferentes tipos. Por ejemplo, el riesgo operativo se refiere a las pérdidas potenciales que surgen de fallas operativas internas o externas, como errores de procesos o el mal funcionamiento del sistema. Los riesgos financieros abarcan riesgos asociados con las transacciones financieras y la fluctuación del mercado. Los riesgos estratégicos implican riesgos relacionados con los objetivos y planes a largo plazo de una organización…

Las organizaciones pueden adaptar sus estrategias de gestión de riesgos al entender los diferentes tipos de riesgos.

¿Cuáles son los diferentes tipos de riesgos?

1. Riesgos Financieros  

Los riesgos financieros se refieren a la posibilidad de pérdidas financieras debido a las fluctuaciones del mercado, crisis económicas o mala gestión financiera. Estos riesgos incluyen: 

  • Riesgos del mercado: Riesgo de pérdidas financieras debido a variaciones de los precios de los activos, como acciones, materias primas y divisas, en el mercado.
  • Riesgo de crédito: Riesgo de pérdida derivado del incumplimiento de las obligaciones contractuales de un cliente, proveedor u otra contraparte. Esto puede llevar a no recibir el pago de los bienes o servicios proporcionados. 
  • Riesgo de la tasa de interés: Riesgo de que las fluctuaciones de los intereses puedan tener un impacto en los costos del financiamiento y el rendimiento de las inversiones.
  • Riesgo de liquidez: Riesgo de no ser capaz de cumplir las obligaciones financieras a corto plazo debido a la falta de fondos disponibles o la incapacidad de convertir rápidamente los activos en efectivo.

2. Riesgos operativos

Los riesgos operativos surgen de procesos de sistemas internos inadecuados y errores humanos. Estos riesgos incluyen: 

  • Fallas de los procesos: Las ineficiencias o fallas en los procesos operativos que pueden tener un impacto en la entrega del servicio o la calidad del producto. 
  • Error humano: Los errores que cometen los empleados pueden llevar a paros operativos o pérdidas financieras.
  • Fallas tecnológicas: El mal funcionamiento o las fallas en los sistemas tecnológicos llevan a la interrupción del servicio y a las violaciones de datos. 
  • Interrupciones en la cadena de suministro: Interrupciones a causa de desastres naturales, problemas geopolíticos y fallas de los proveedores.  

3. Riesgos de reputación  

Los riesgos para la reputación están relacionados con el daño al nombre de la empresa, la imagen de la marca o la percepción pública de una organización. Estos incluyen:

  • Crisis de relaciones públicas: Publicidad negativa, escándalos o controversias que pueden empañar la imagen de una organización. 
  • Insatisfacción del cliente: Las malas experiencias de los clientes generan críticas negativas, disminución de la lealtad y erosión potencial de la marca.
  • Reacción de las redes sociales: Comentarios negativos virales o desinformación difundida a través de las redes sociales. 

4. Riesgos normativos y de cumplimiento  

Los riesgos normativos y de cumplimiento surgen por no adherirse a las leyes, reglamentos y normas de la industria. Estos riesgos abarcan:

  • Sanciones legales: Consecuencias legales o financieras debido al incumplimiento de las leyes y reglamentos. 
  • Violaciones a la privacidad de datos: Violación a las leyes de protección de datos que lleva a multas y daño a la reputación. 
  • Violaciones éticas: Acciones que van en contra de las normas éticas y los valores, que conducen al escándalo público y a las consecuencias legales. 

5. Riesgos estratégicos 

Los riesgos estratégicos surgen de malas decisiones estratégicas, cambios en las dinámicas del mercado o la adaptación inadecuada a las tendencias de la industria. Estos riesgos incluyen:

  • Riesgos de la competencia: El impacto a la empresa por la competencia agresiva o el surgimiento de competidores disruptivos. 
  • Cambios en el mercado: Cambios en las preferencias del cliente, los avances tecnológicos o los cambios económicos que vuelven obsoletas las estrategias existentes. 
  • Fracaso de la innovación: Invertir en esfuerzos de innovación infructuosos que no dan los resultados esperados.

6. Riesgos naturales y del medio ambiente 

Los riesgos naturales y del medio ambiente están asociados con el impacto de factores ambientales en una organización. Estos riesgos incluyen:

  • Desastres naturales: Eventos como temblores, huracanes, inundaciones e incendios forestales que pueden dañar las instalaciones o interrumpir las operaciones. 
  • Impacto del cambio climático: Riesgos que surgen de los patrones del cambio climático, escasez de recursos y los cambios reglamentarios relacionados con las preocupaciones ambientales.

LEER: 10 errores comunes en la identificación, análisis y evaluación de riesgos

Las mejores prácticas para gestión efectiva de riesgos

Esquematicemos las mejores prácticas que las organizaciones deben de adoptar para garantizar que están bien preparadas para navegar por el panorama siempre cambiante de los riesgos.  

Las mejores prácticas para gestión efectiva de riesgos

  1. Establecer una cultura de riesgo 
    Cultivar una cultura de riesgos es la piedra angular de la gestión efectiva de riesgos. Debe animarse a todos los miembros de la organización, desde la dirección hasta los empleados, a identificar y notificar los riesgos potenciales sin temor a repercusiones. Los canales de comunicación abiertos fomentan la detección temprana del riesgo y permiten la intervención oportuna. 
  2. Evaluar periódicamente los riesgos  
    Las evaluaciones de riesgos periódicas y exhaustivas son vitales para identificar las amenazas potenciales. Estas evaluaciones incluyen evaluar factores internos y externos que podrían generar un impacto en la organización. Colabore con equipos multifuncionales para entender de forma exhaustiva los riesgos en todos los departamentos. 
  3. Priorizar riesgos de manera estratégica 
    No todos los riesgos son iguales. Priorizar es importante para la asignación de recursos. Implemente un sistema de puntuación de riesgos que considere cada impacto potencial y probabilidad de cada riesgo. Esto permite a las empresas enfocarse en abordar riesgos de alta prioridad que pudieran tener consecuencias más significativas. 
  4. Desarrollar estrategias de mitigación claras 
    Las estrategias de mitigación son la columna vertebral de la gestión de riesgos. Desarrolle planes detallados para abordar los riesgos identificados. Estos planes deben esbozar las medidas preventivas, los planes de contingencia y las estrategias de transferencias de riesgos. Cada estrategia debe de tener los pasos de acción, las responsabilidades y plazos claros.
  5. Controlar y revisar de manera continua 
    La gestión de riesgos es un proceso continuo, no una tarea de solo una ocasión. Monitoree de manera continua la efectividad de sus estrategias de mitigación y actualícelas según sea necesario. Manténgase atento a los cambios en el ambiente de negocios y a los riesgos emergentes que puedan generar ajustes en su enfoque. 
  6. Adoptar la tecnología  
    Aproveche la tecnología para mejorar las capacidades de gestión de riesgos. Utilice el software de gestión de riesgos, las herramientas de análisis de datos y los modelos predictivos para identificar patrones, pronosticar riesgos potenciales y tomar decisiones informadas basadas en datos.  
  7. Fomentar la colaboración multifuncional 
    Los riesgos generalmente trascienden los límites departamentales. Fomente la colaboración entre los diferentes departamentos para obtener diversas perspectivas de riesgos. Esto garantiza un entendimiento más completo de las amenazas potenciales y de la implementación efectiva de las estrategias de mitigación. 
  8. Proporcionar formación continua 
    Equipe a sus empleados con el conocimiento y las habilidades necesarias para la gestión efectiva de riesgos. Sesiones periódicas sobre identificación de riesgos, evaluación y respuesta garantizan que todos en la empresa son proactivos en la mitigación de riesgos.
  9. Fomentar las pruebas de escenarios 
    La simulación de posibles escenarios de riesgos permite a las organizaciones poner a prueba la efectividad de sus planes de mitigación. La prueba de escenarios ayuda a identificar carencias, puntos débiles y oportunidades para la mejora de sus estrategias. 
  10. Conseguir el apoyo de los directivos 
    El compromiso de la dirección es crítica para el éxito de la implementación de la gestión de riesgos. Cuando los líderes priorizan la gestión de riesgos y asignan los recursos necesarios, refuerzan la importancia de esta práctica en toda la organización. 
  11. Estar informado sobre las tendencias de la industria  
    Manténgase al día sobre las tendencias de la industria, los cambios reglamentarios y los riesgos emergentes específicos de su sector. Este conocimiento le permite abordar de manera proactiva riesgos que podrían tener un impacto en su organización. 
  12. Aprender de los incidentes pasados  
    Analice los incidentes pasados y los casi incidentes para entender su causa raíz. Utilice esta información para refinar sus estrategias de gestión de riesgos y prevenir incidentes similares en el futuro. 

Beneficios de la gestión efectiva de riesgos 

Implementar estrategias robustas de reducción de riesgos ofrece una serie de ventajas. 

Beneficios de la gestión efectiva de riesgos

  • Interrupciones minimizadas: Las medidas proactivas reducen la probabilidad de interrupciones en sus operaciones. 
  • Toma de decisiones mejorada: Un conocimiento profundo de los riesgos permite a las empresas tomar decisiones con conocimiento de causa. Pueden evaluar mejor los resultados potenciales de diferentes elecciones y asignar recursos de manera más efectiva. 
  • Ahorro de costos: Prevenir riesgos suele ser más rentable que afrontar sus consecuencias. 
  • Reputación mejorada: La reducción efectiva de riesgos demuestra su compromiso para salvaguardar los intereses de las partes interesadas.
  • Continuidad operativa: Las organizaciones bien preparadas pueden mantener la continuidad de negocios incluso cuando enfrentan desafíos.

LEER: Cómo utilizar el gobierno operativo para crear valor de negocios sostenible

Resumen

Adoptar la gestión efectiva de riesgos es una inversión proactiva para la resiliencia y longevidad de su organización. Usted puede navegar estratégicamente los riesgos potenciales y las incertidumbres a través de un enfoque integral que incluye la identificación de riesgos, la evaluación y el seguimiento.

Incorpore la gestión de riesgos como un aspecto integral de su cultura organizacional. De este modo, reforzará su posición en el mercado, fomentará la confianza de las partes involucradas y navegará con confianza el intrincado panorama de negocios. Una estrategia de gestión de riesgos robusta lo capacita para tomar decisiones bien informadas, optimizar la asignación de recursos y aprovechar las oportunidades de crecimiento mientras preserva sus activos y mantiene su reputación. 

FAQs

La gestión de riesgos identifica, evalúa y prioriza los riesgos para minimizar sus efectos adversos en un proyecto u organización. 

Un riesgo operativo se refiere a las pérdidas o daños potenciales que pueden derivarse de los procesos, sistemas o procedimientos internos de una organización.

Algunas de las técnicas de gestión de riesgos son evitarlos, reducirlos, transferirlos, aceptarlos y compartirlos.  

La gestión de riesgos puede reducir el riesgo al implementar medidas preventivas, crear un plan de acción e implementar controles y garantías para minimizar la probabilidad y el impacto de un riesgo.

Un evento de riesgo es un suceso específico o un incidente que potencialmente puede causar daño, pérdida o perjudicar a una organización. 

Aunque los riesgos se pueden identificar y evaluar, no todos los riesgos se pueden gestionar. Algunos riesgos pueden ir más allá del control de una organización o tener consecuencias significativas que no se pueden mitigar. 

Los gerentes de riesgos son los responsables de identificar, evaluar y gestionar los riesgos organizacionales. Desarrollan las estrategias de gestión de riesgos y trabajan con las partes interesadas para implementar y monitorear las prácticas de gestión de riesgos. 

La gestión de riesgos requiere un enfoque sistemático y estructurado que implica identificar, evaluar y mitigar riesgos. También requiere de comunicación efectiva y de la colaboración entre los equipos del proyecto y las partes involucradas. 

Un responsable de riesgos supervisa y coordina las actividades de gestión de riesgos de una organización. Desarrolla las políticas de gestión de riesgo, garantiza el cumplimiento de las normativas y aconseja a la alta dirección sobre las cuestiones relacionadas con los riesgos.